«Estamos barajando el incidente como una posible provocación antisemita, aunque podría haber sido simplemente un acto vandálico», declaró el portavoz del Ministerio del Interior, Tomasz Sklodowski.
A pesar de que el atacante lograra huir, al parecer se trató de un hombre joven, Sklodowski añadió que se logró establecer un retrato del atacante con la ayuda de testigos, y que este identikit ya fue distribuido a todas las patrullas policiales de la capital polaca.
«El acto se produce justo cuando el Papa visita Polonia y Auschwitz, lo que significa que podría tratarse de un ataque antisemita que podría intentar estropear la imagen del país», manifestó el portavoz.
Según el rabino, su agresor gritó ‘Polonia para los polacos’.
