Cumbre de Bush y Olmert:

Presión americana

El Presidente de los Estados Unidos, George W. Bush, apoyó -el pasado martes 23 de mayo- la estrategia propuesta por el Primer Ministro de Israel, Ehud Olmert, para retirar asentamientos israelíes en Cisjordania y la redefinición unilateral de las fronteras si es que no se puede alcanzar el plan de paz propuesto en ewl ‘Mapa de Rutas’.

Para Bush, la propuesta de Olmert resulta un plan audaz para alcanzar un acuerdo con el Presidente palestino, Abú Mazen.
El visto bueno condicionado expresado por Bush facilita a Olmert aceptar un próximo acercamiento hacia Mazen y «agotar todas las vías de negociación necesarias» para lograr un acuerdo aceptable por ambas partes. Recordemos que los palestinos no están de acuerdo con el plan dado que grandes asentamientos israelíes permanecerían para Israel así como el sector Este de Jerusalem.
«La mejor solución es aquella que logre un estatus final negociado», destacó Bush recordando el principio de dos países para dos pueblos, algo que, aseguró, no sería posible de no llegarse a un acuerdo consensuado.
Para Olmert, a su vez, esta es la oportunidad para iniciar una negociación con fecha límite y que «no se prolongará indefinidamente». De no hallar una respuesta negociadora por parte de las autoridades palestinas, Olmert aseguró que su Gobierno actuará unilateralmente.
Bush, refiriéndose al Gobierno palestino, reclamó «una elección estratégica por la paz», recordando que la comunidad internacional y su país reclaman el reconocimiento de Israel, el cese del terrorismo y la aceptación de los acuerdos pre existentes.
Para Olmert el compromiso de Hamas con el terrorismo, y su negativa a reconocer a Israel, dificulta “las posibilidades de promover un proceso de paz genuino». También aseguró que no mantendrá ningún tipo de negociación con Hamas hasta que reconozca el derecho israelí «a vivir en paz y seguridad».