Sigue la polémica I:

«Hasbará y negocios (de algunos)». Respuesta.

El Sr. Guillermo Lipis, autor de una nota publicada en ese periódico, pide que se abra un debate para saber "en que se gastan los dineros comunitarios cuando se habla de propaganda. (hasbará)......". En realidad no formula una pregunta honesta, sino por el contrario, en medio de una mescolanza desordenada de ofensas, presuntas denuncias, y con maliciosa intencionalidad, simulando una seriedad que no la hay, mancilla nombres y desprecia a personas. Este es el primer párrafo de la respuesta del Sr Mario Schvindlerman a la nota que se publicara bajo el mismo título. Si usted quiere enterarse de la respuesta completa siga leyendo.

El Sr. Guillermo Lipis, autor de una nota publicada en ese periódico, pide que se abra un debate para saber «en que se gastan los dineros comunitarios cuando se habla de propaganda. (hasbará)……».
En realidad no formula una pregunta honesta, sino por el contrario, en medio de una mescolanza desordenada de ofensas, presuntas denuncias, y con maliciosa intencionalidad, simulando una seriedad que no la hay, mancilla nombres y desprecia a personas.
Se permite denominar peyorativamente «opinadores oficiales» y «opinologos» a Marcelo Birmajer, Natalio Steiner y Julian Schvinderman, por el solo hecho de conformar una voz de opinión e información disidente de la de él, de la del periódico Nueva Sion y del partido Meretz Argentina. Las tres personas mencionadas estan contratados por la Amia, y auspiciados por la Organización Sionista Argentina.
La idea es hacer hasbará (esclarecimiento) para defender a Israel, y a los judios en general, ante el descomunal ataque de anti-israelismo y antisionismo que sufren desde los distintos medios de prensa escrita, televisiva y radial, procurando lograr alguna cuota de justicia y objetividad en el tratamiento de las noticias.
Por otro lado, en su nota, son honrados por Vd. con el reconocimiento de «periodistas o politologos de talla», entre otros, Shlomo Slutzky, Oscar Cardoso, Marcelo Cantelmi, (del diario Clarin), Jorge Lanata, etc., quienes conocidos como detractores de Israel, todos ellos son rechazados por la mayoría de la comunidad judía harta de leer o tener que escuchar con que malicia manipulan la información, desnaturalizan los acontecimientos, y desprestigian al estado de Israel, su gobierno y sus habitantes.
Señala Vd. orgullosamente que «todos ellos han concurrido gustosos» a esa casa (Tzavta). Sinceramente, no es para menos.
He aquí la raíz del conflicto. Como ya no puede dirimir con ideas la confrontacion, recurre a la ofensa como medio de lucha, pero como tampoco le es suficiente, entonces apela a una «maliciosa intencionalidad» como segundo recurso.
En primer lugar hace saber que Amia eroga mensualmente la suma de $ 400,00 monto éste que es percibido de manera asimetrica, señalando en especial que hay unos «rezagados» con relacion a otro. Si su objetivo es a traves de la cizaña crear rupturas en este grupo de intelectuales, debo comunicarle que, lamentablemente para Vd., falló. Siguen juntos como siempre, sin desinteligencias,afirmando su voluntad de hacer hasbará, (que dicho sea de paso su traducción es esclarecimiento y no “propaganda” como erroneamente Vd. señala).
Ahora bien, quien escribe esta nota, Mario Schvindlerman, es actual prosecretario de Amia, a cargo del Dpto. de Cultura, y soy el padre de Julian Schvindlerman, quién ha pactado por su cuenta honorarios profesionales en una cantidad que es la que usualmente cobra a todas las instituciones por sus disertaciones. El solo hecho de que sea mi hijo (insistentemente señalado en su nota) le permite vomitar el concepto de «beneficio filiatorio». Quien soy yo?. En esta nota no tiene importancia, pero si quiero hacer saber quien es Julian:Licenciado en Administración (UBA), Master en Ciencias Sociales (Univ. Hebrea de Jerusalem), Autor del libro “Tierras por paz, tierras por guerra”, ex Director Adjunto de UN Watch (Ginebra) ex columnista de The Miami Herald, columnista de Comunidades entrevistado por Voice of America (EE.UU.), conferencias en Mexico, Costa Rica, Guatemala, con notas traducidas a varios idiomas, y mucho mas. Esta es la persona que se permite Vd. descalificar llamandolo despreciativamente «opinologo». Vaya con su particular criterio. Supongo tendrá Vd. meritos propios mejores o al menos iguales para hacerlo. Ahora veamos que otras cosas hace este prosecretario. He contratado de manera regular y rentada a una profesora de historia judía del staff del periódico Nueva Sion. Tambien por indicación mía ha sido contratada la hija de un miembro del Consejo Directivo de Amia,( es el representante de Meretz), con el pago de varios miles de pesos, por un trabajo especifico, legitima y honradamente ganados, sin que algún perverso insinuara siquiera hablar de «beneficio filiatorio». La bonhomía siempre es superior. Si Vd., Sr. Lipis, no estaba al tanto, es porque pregunta mal, y no «que nadie brinda informacion oficial» a su decir. Tambien debe saber que parte de los fondos comunitarios se afectaron a auspiciar, con dinero, la publicación del libro “Nueva Sion…” y que ademas se facilitó a costo de la Amia el uso de un salón en la Feria del Libro para su presentación..Debe saber tambien que su periodico percibe un subsidio mensual de Amia, cuyo monto es casi el doble de lo que tanto le preocupa se gasta en hasbará. Si no sabe ésto, que es público, o es mal periodista o muy parcial en sus preocupaciones, y lo que es peor muy parcial en las apreciaciones..
Tambien dice Vd. en la nota que la Amia «decidió» invitar a su compa#era Valeria Z. a compartir el debate que realizan mensualmente los «opinadores oficiales» y que no le ofrecieron paga alguna. La verdad, es que al final de un debate, Vds pideron tener una voz para defender vuestra posicion en esa mesa y al momento se les concedió el derecho de hacerlo. A pesar de ser varias veces invitada vuestra delegada, vino una sola y única vez. De donde se atribuye Vd. que Amia debe solventar o pagar su presencia. No debe `Vd. ser tan desconsiderado y confundir a los lectores poniéndose en víctima cuando para nada lo es. Vds, recalco, pidieron estar presentes y alli estuvieron. Decir que Amia deberia abonar honorarios, realmente pretenderlos, es una demasía de su parte, y denunciarlo como una irregularidad, es realmente de mucho caradurismo hacerlo.
Tengo mucho mas que decir, pero no quiero extender mas esta nota.
Le digo a Vd. que ya no continuo con Vd. `debate alguno, pues trabajo en positivo, y contestar sus agravios me demando un tiempo que lamento no haber utilizado en algo mas propicio.
Atte. Dr. Mario Schvindlerman